Joaquín Aibar · Jul 01, 2019 at 05:24
Los individuos de las plantas que puedan presentar resistencias a los herbicidas están siempre ahi, en nuestras fincas. Una de las características de las malas hierbas es su plasticidad genética, que les permite adaptarse con facilidad a diversas situaciones. Si en una finca aplicamos reiteradamente un materia activa, u otras con similar mecanismo de acción, lo que hacemos es generar una presión de selección, que elimina los individuos sensibles y, si los hay, deja a los resistentes, que en pocas campañas serán los mayoritarios. La solución es integrar métodos de control, no basarse solamente en el control químico, y si se emplean herbicidas no reiterar tratamientos con materias activas que tengan el mismo mecanismo de acción.

Joaquín Aibar Lete - Escuela Politécnica Superior Universidad de Zaragoza