Alta presencia de azúcares añadidos en la dieta de los españoles

El azúcar está más presente en la dieta diaria de lo que aparentemente podría parecer, según la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición. Cada español consume una media de 111’2 gramos de azúcar al día, una cantidad que cuadriplica los 25 gramos que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Fecha: 17-Oct-2019

Tags: azúcares , dieta

Fuente: Retailactual

“El azúcar que podemos añadir al café o al té no son nada en comparación con el que se encuentra en los alimentos ultraprocesados, y pasan desapercibidos puesto que, actualmente, no es obligatorio advertir de este elevado porcentaje”, afirma Paula Crespo, presidenta del Colegio Oficial de Dietistas y Nutricionistas de la Comunitat Valenciana (CODiNuCoVa).

Para sensibilizar a los consumidores acerca de esta realidad, el Colegio reta en el Día Mundial de la Alimentación, a no comer ultraprocesados y a priorizar, durante las 24 horas, frutas, verduras y alimentos frescos. Además, los dietistas-nutricionistas recomiendan leer el etiquetado de cada producto que se consuma.

“El reto empieza por el desayuno. Los cereales o las galletas, el cacao en polvo, los zumos de frutas y los yogures de sabores, son productos muy consumidos en la dieta de los españoles, ya tienen cantidades de azúcares añadidos mucho más elevadas de lo recomendado para un único día”, explica Rocío Planells, dietista-nutricionista gerente del CODiNuCoVa.

En la identificación de los productos, los expertos consideran necesario realizar una clara distinción entre los azúcares presentes en los propios sustentos de forma natural, como en las frutas y verduras, y los azúcares añadidos durante el procesado de alimentos, con el propósito de mejorar su conservación o hacerlos ‘más apetecibles’.

La ingesta de alimentos con elevadas cantidades de azúcares se relaciona con problemas importantes para la salud: “No sólo puede significar un aumento del riesgo de caries dental, sino que, junto a una alimentación poco equilibrada, también se relaciona con un incremento del peso y, a largo plazo, problemas de obesidad, que irán asociados a un riesgo mayor de padecer diabetes y ciertos tipos de cáncer”, comenta la presidenta Paula Crespo.