Ante la subida de las temperaturas que se dará este fin de semana, el riesgo de incendio aumenta, por tanto, extremar las precauciones se convierte en algo vital para continuar la cosecha de cereal, en la que la mayoría de los agricultores se encuentran inmersos durante esta época del año y que Aragón permite continuar.

Tras la prohibición de varias Comunidades Autónomas de continuar con la labor del agricultor a modo de prevención, UPA considera que los agricultores son los primeros interesados en no provocar tales incendios, pues esto echaría a perder toda la producción y, por ende, su fuente de ingresos.

Recomendar, con información sobre la precaución que deben tener los agricultores, y no prohibir debería ser el objetivo de los gobiernos autonómicos tras observar la previsión de temperaturas.

Por tanto, UPA apuesta por “seguir cosechando, pues los trabajadores del campo son profesionales. Pero con precaución y tomando todas las medidas que sean necesarias, ya que los agricultores somos los primeros que nos lo jugamos todo”, ha señalado el secretario general de la organización, José Manuel Roche.

Asimismo, cabe destacar la labor de extinción del fuego de los profesionales agrarios, pues estos son los que mejor conocen el terreno, disponen de toda la maquinaria necesaria y por supuesto, son los máximos defensores del medio en el que trabajan y viven.

Es importante también la diferencia entre incendio agrario e incendio forestal, pues los segundos, que podrían venir motivados por la sequía y la mala limpieza de los montes, son los que se extienden sin control, afectando toda la fauna y flora del territorio.