CHIL.org

Marta García

14/07/13

Científicos del ARS descubren una nueva especie de fresa en Oregón

Una nueva especie de fresa recientemente descubierta provee de nuevo material genético para investigaciones sobre plantas y podría llevar al desarrollo de una nueva variedad de fresas comerciales, según una científica del Servicio de Investigación Agrícola (ARS). Los genes de las fresas nuevamente creadas mediante cruces podrían ofrecer nuevos sabores o resistencia a enfermedades de plantas.

Kim Hummer, que trabaja en el Repositorio Nacional de Germoplasma Clonal mantenido por el ARS en Corvallis, Oregón, descubrió la nueva especie durante sus expediciones para coleccionar plantas en los altos picos de las montañas Cascade en Oregón. La científica denominó la nueva fresa como Fragaria cascadensis.

ARS es la agencia principal de investigaciones científicas del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA por sus siglas en inglés), y esta investigación apoya la prioridad del USDA de promover la seguridad alimentaria internacional.

La nueva fresa es una planta perenne con flores de color blanco y hojas de color verde. Es diferente de otras especies de fresas en la región porque tiene “cabello” en la superficie de las hojas, y produce frutas pequeñas de color marrón llamadas “achenes” en la superficie de la fresa. También, a diferencia de otras especies, la nueva fresa tiene 10 juegos de cromosomas en vez de los ocho juegos en las fresas comerciales.

La distribución de la nueva fresa en las montañas Cascade en Oregón se extiende desde el río Columbia, en la parte norteña del estado, a las inmediaciones del lago Crater en la parte sureña de Oregón, desde alturas de 3.000 pies hasta la línea arbórea. El alcance norteño de distribución de F. cascadensis tiene precipitaciones medias anuales de 12 a 15 pulgadas, pero el alcance en el sur del estado recibe solamente seis pulgadas de precipitaciones anualmente.

F. cascadensis ahora está incluido en las colecciones vivas del repositorio de germoplasma en Corvallis, donde hay muestras de germoplasma de frutas de clima templado, frutos secos y otros cultivos.

Según Kim Hummer, el impacto principal de la nueva fresa podría ser en forma de cruces de esta especie con otras variedades que tienen el mismo número de cromosomas, tales como la fresa cultivada F. vescana o la especie rusa F. iturpensis. Estos cruces podrían producir híbridos que tienen resistencia a enfermedades, un sabor mejorado, u otros rasgos importantes.

Un informe sobre el descubrimiento de la nueva fresa fue publicado en ‘Journal of the Botanical Research Institute of Texas’ (Revista del Instituto de Investigaciones Botánicas de Texas).