Estas son algunas de las conclusiones del VI Congreso de Alimentación Animal, celebrado los pasados 4 y 5 de abril en Valladolid con éxito de asistencia y de participación, según el balance realizado por la Asociación de Fabricantes de Piensos Compuestos de Castilla y León (Asfacyl), organizadora este año del encuentro del sector.  

Bajo el título ‘Presente y futuro de la alimentación animal’, el congreso contó con la asistencia de más de 400 profesionales y favoreció el debate en profundidad gracias al formato de mesas redondas y a la ‘app’ habilitada para que los congresistas pudieran formular sus preguntas a los ponentes.  

Los participantes coincidieron en que el sector de la alimentación animal es un sector garante de la seguridad alimentaria y en que se debe comunicar más al consumidor final sobre su actividad.

La calidad y la seguridad alimentaria siempre han sido pilares fundamentales en la industria de la alimentación animal, que ya en 2002 implantó una Marca de Garantía para certificar la calidad de aquellos piensos que se elaboran con los más estrictos controles. Además, el sector ha desarrollado de forma privada sistemas de control de las materias primas.

En relación con la economía circular, el sector destaca que la sostenibilidad va intrínseca al trabajo que desarrolla.  

“Nuestra industria es una de las más capaces a la hora de reintegrar en la cadena productiva gran cantidad de coproductos que, de otra forma, habrían permanecido en la categoría de residuos. Participamos activamente en todas las acciones de economía circular, ya que somos economía circular en toda su extensión, utilizando aquellos productos que la industria alimentaria no incorpora en el canal de la alimentación humana”, detallaIldefonso Vela, presidente de Asfacyl.

El valor de las ventas de la industria de la alimentación animal alcanzó los 7.495 millones de euros en 2017, según la última Encuesta Industrial Anual de Productos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE). Ese año, las cifras de producción de piensos fueron récord, al sobrepasar los 34 millones de toneladas, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.