Guía técnica sobre Política Pesquera

Los recursos pesqueros constituyen un recurso natural, renovable y móvil, cuya reproducción y desplazamientos escapan a nuestro control. Son parte de nuestro patrimonio común y las poblaciones de peces sanas pueden soportar un esfuerzo de pesca razonable pero necesitan un entorno marino saludable. La pesca y la acuicultura son dos de las principales utilizaciones que hacemos del mar. Además de constituir una fuente de alimentación saludable y placentera, estas dos actividades crean puestos de trabajo indispensables en las zonas costeras y promueven el bienestar económico y social de las zonas pesqueras de la Unión Europea. Sin embargo estas dos actividades deben regularse mediante la cooperación internacional con el fin de permitir una renovación continua de las poblaciones y la protección de los ecosistemas marinos. Se precisan, por tanto, normas que impidan que unos pocos pesquen de forma excesiva en detrimento de todos.