La Universitat Politècnica de València (UPV), a través del Instituto Agroforestal Mediterráneo (IAM), y Seipasa, empresa española especializada en el desarrollo y formulación de biopesticidas, bioestimulantes y fertilizantes para la agricultura, trabajan en el desarrollo de un nuevo herbicida natural capaz de reemplazar a los actuales productos de origen sintético presentes en el marcado.

El objetivo principal de este trabajo, es responder a la demanda de productores que, desde hace tiempo, piden soluciones para sus cultivos con menos impacto ambiental y por supuesto, evitar la aparición de resistencias en plagas y enfermedades.

Se redujeron las herramientas, pero los problemas siguen…

Según los especialistas e investigadores del sector, en 2009, se ha modificado la legislación europea respecto al uso sostenible de productos fitosanitarios, promoviendo estrategias en la gestión integrada de plagas. Desde ese momento, la desaparición de materias activas ha sido constante, por lo que es más necesario que nunca disponer de nuevas herramientas para esa gestión integrada.

Por otro lado, remarcan que, en la actualidad existe una tendencia a una alimentación más saludable debido al mayor consumo de frutas y hortalizas libres de residuos, lo cual es un nicho de mercado a cubrir por parte de estos productos.

Resultados positivos en experimentos realizados

Los ensayos llevados a cabo en condiciones controladas, de momento, en el control de malas hierbas muestran un buen desempeño general, con resultados positivos en cuanto a la rapidez de acción, eficacia y ausencia de residuos en la producción final y los avances más significativos del proyecto han sido publicados en las revistas científicas Agronomy y Molecules.

Otras ideas de trabajo

Al mismo tiempo, existen otros proyectos cuyo objetivo final es asegurar el control respetando el medio ambiente y la salud de las personas. En el caso de Seipasa y la UPV trabajan de forma conjunta en otras líneas de investigación, con el objetivo de generar nuevas herramientas en el manejo integrado de plagas.

Otro ejemplo de trabajos similares, es el caso del equipo de investigadores internacionales encabezado por científicos de la Universidad de Tübingen, Alemania que ha descifrado el funcionamiento de una toxina citolítica, la cual es producida por algunas de las enfermedades de cultivos más devastadoras del mundo y se podría utilizar en la obtención de herbicidas naturales.