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Irene Campos

08/05/14

Las algas marinas son un gran bio estimulante para las plantas

Fernando Feliu Sendra ocupa actualmente el cargo de director ejecutivo y responsable técnico de la empresa Plymag S.L., firma fundadora de Asociación Española de Fabricantes de Agronutrientes (AEFA) y operadora en el sector de los fertilizantes desde 1978. La empresa Plymag comercializó el primer extracto de algas del mercado español (SM-6) en el año 1981.

Fernando Feliu ha participado en distintos cargos durante toda la trayectoria de AEFA. Estuvo en la comisión de comunicación en los primeros años coordinando la primera página web de la asociación, posteriormente en el año 2008 ocupó el cargo de presidente de AEFA hasta 2012 y actualmente colabora con la asociación representándola en el comité de partes de Intereco y como coordinador de la comisión de fertilizantes nacionales y CE.

¿Qué son los extractos de algas?

Son productos obtenidos de la extracción química o física de algas marinas. Las algas han sido usadas desde siempre por el hombre como fertilizante, alimento para el ganado y sobre todo en las culturas orientales como alimentación humana. Las primeras referencias de su uso como enmienda agrícola datan de China en el año 2700 a. c. y ya en Europa, se extiende su uso agrícola desde el siglo XII.

¿Por qué las algas?

Para comprender el sorprendente efecto que tienen las algas como bioestimulante tenemos que observar el único e inhóspito hábitat donde crecen aquellas algas de donde se obtienen los extractos comerciales: las costas del Océano Atlántico situadas en latitudes frías y expuestas a las inundaciones periódicas de las mareas.

Estas algas pasan una parte del tiempo inundadas bajo el agua y a las pocas horas quedan expuestas al sol en una pradera costera cuando se retira la marea. Para poder resistir en estas condiciones tan extremas, estas algas han desarrollado defensas naturales en forma de compuestos químicos, muchos de los cuales todavía desconocemos y que son extractados en los procesos de obtención.

En definitiva una fuente natural de sustancias químicas desarrolladas para soportar situaciones extremas que conseguimos aislar y trasladar a los productos comerciales para ser utilizados por otras plantas.

¿Qué métodos de extracción se utilizan?

Las algas que se manufacturan habitualmente para los extractos son las denominadas como algas pardas. En ellas se encuentran Ascophyllum nodosum, Laminaria sp., Fucus sp., Macrocystis pyrifera, Ecklonia máxima y Durvillea sp. por ejemplo.

Todas ellas, para su posterior utilización, son generalmente cortadas en fresco sin arrancarlas de las praderas de algas costeras en bajamar, las algas son lavadas, cortadas, secadas y molidas para ser utilizadas en los procesos de extracción industriales. Por tanto son un recurso renovable ya que se cortan para esperar su crecimiento.

En cuanto a los procesos de extracción podemos distinguir entre procesos químicos y procesos físicos. En los químicos las algas son atacadas generalmente por una base fuerte y se extraen todos los componentes solubles en ese medio, es posible que en estos procesos se puedan perder algunas de las cualidades de las algas en fresco.

Dentro de los procesos físicos encontramos: extracciones acuosas al vacío, procesos de ruptura celular y micro-crioaplastamiento. En estos procesos no hay ataques químicos y con sus extractos son susceptibles de obtenerse posteriormente una mejor respuesta de la planta tras la aplicación del producto final.

¿Qué contienen y cómo actúan los extractos de algas?

Los extractos de algas no responden a la definición de fertilizantes, ya que no contienen cantidades significativas de macro y microelementos, aunque sí contienen de todos en trazas.

Lo sorprendente de las algas, y esto en parte puede ser debido a su hábitat hostil, es la cantidad de polisacáridos complejos que no están presentes en las plantas terrestres. Las algas pardas antes referidas contienen polisacáridos tipo laminarinas, fucoidanos y alginatos, que además se ha demostrado mediante bioensayos, que sus extractos pueden inducir la producción de auxinas y citoquininas naturales en las plantas sobre las que se aplican.

Esas sustancias permiten que los extractos de algas sean unos de los mejores bioestimulantes del mercado.

¿Puede definirnos la palabra bioestimulante?

Entendemos por bioestimulante todo producto que, sin tener en cuenta el aporte de nutrientes, contiene sustancias, compuestos o microorganismos cuya función cuando se aplica en las plantas o en la rizosfera, mejoran el desarrollo del cultivo, su vigor, el rendimiento y/o de la calidad, normalmente mediante la estimulación de los procesos naturales que benefician el crecimiento y las respuestas al estrés abiótico.

¿Qué beneficios producen los extractos de algas?

Cuando los productos comerciales han sido desarrollados de forma adecuada y se han aplicado correctamente, los beneficios más comunes son:

- Crecimiento vigoroso: Las ramas crecen a lo largo y con aumento de diámetro.

- Plantas más fuertes: Las raíces adquieren mayor longitud y ramificación.

- Induce la brotación natural: Sin alteraciones en la planta.

- Incremento de la absorción de los elementos minerales al suelo.

- Notable resistencia a los efectos climáticos: como heladas, fuerte calor, sequedad y en general, mayor resistencia a los ataques de las plagas.

- Ayuda a superar la crisis del post-transplante.

- Potencia la acción de los fungicidas.

- Aumento de la producción vendible: Con uniformidad en el tamaño de la fruta.

¿Son los extractos de algas naturales respetuosos con el medio ambiente?

La materia prima utilizada es como ya hemos comentado, un recurso natural que obtenemos de la naturaleza y además es renovable, por lo que los productos a base extractos de algas, pueden considerarse como uno de los pocos bioestimulantes ecológicos y respetuosos con el medio ambiente.

¿Se pueden utilizar en los cultivos ecológicos?

No todos, para ello habrá que comprobar que el producto está certificado para ese fin por alguna entidad certificadora.

¿Qué marco regulador existe sobre las Algas?

Actualmente las algas están siendo comercializadas bajo el amparo de la orden APA 1470/2007 de otros medios de defensa fitosanitaria (OMDF). Según fuentes del MAGRAMA esta ley va a ser derogada en breve y sustituida por un nuevo real decreto donde incomprensiblemente no van a tener cabida los extractos de algas. Ya que la definición de OMDF de la orden APA quedará ahora fuera de la nueva normativa.

La comisión de fertilizantes de AEFA está trabajando actualmente en la propuesta de un nuevo tipo de fertilizante, al amparo del actual real decreto de fertilizantes 506/2013. Confiamos en que pueda ser estudiada por la comisión de expertos del MAGRAMA antes del verano, requisito previo para que pueda ser incluida en la ley.

El MAGRAMA ha mostrado su disposición a que puedan integrarse las algas en la actual legislación sobre fertilizantes, pero sería bueno que el ministerio demostrara su buen talante, permitiendo un período puente hasta que se aprobase su inclusión, ya que como hemos visto, existen pocos insumos con las propiedades de mejorar los cultivos, siendo además un recurso natural y renovable.

¿Qué ocurrirá en el futuro con los extractos de algas?

Los extractos de algas ya están incluidos en algunas legislaciones nacionales europeas, por ejemplo la francesa. Hay consenso en los foros europeos que deberían ser parte de la nueva ley de bioestimulantes que actualmente se está debatiendo en el marco de una nueva legislación europea, de donde nacería una nueva rama donde se incluirían todos los productos, que no siendo fertilizantes, tengan carácter bioestimulante. Se calcula que esa ley podría estar lista para 2018.

Mientras, la legislación española debería adaptarse, permitiendo su venta como abono nacional. No hay que olvidar que sólo las empresas de AEFA comercializaron durante el año 2013 la cantidad de más de 1.400.000 litros de extractos de algas.