La Sociedad Aragonesa de Gestión Agroambiental (Sarga) ha vivido en los últimos tiempos un proceso de transformación que ha llevado a la actual dirección a realizar una reforma de gran calado en los ámbitos de las relaciones laborales, contractuales y de la gestión presupuestaria.
Sarga se constituye en octubre de 2012, fruto de la fusión empresarial de Sirasa y Sodemasa, la primera vinculada al sector primario y la segunda al medio ambiente. En diciembre de 2015, el Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad de Gobierno de Aragón decide cesar a Enrique Martín como director-gerente de Sarga siendo sucedido en el cargo por Jorge Díez Zaera.
Es en ese momento, cuando la nueva dirección estudia en profundidad los procedimientos de gestión llevados a cabo hasta entonces. Fruto de ese análisis se detectaron ciertas irregularidades en la gestión de los gastos en dietas y desplazamientos que desembocaron en el despido disciplinario de cuatro trabajadores.
Desde 2016, la empresa trabaja en desarrollar un Canal Ético, recientemente implantado y que supone una herramienta habitual para sociedades de todo el mundo dentro del programa de Compliance. El uso de esta herramienta es extensivo a trabajadores, clientes, contratistas, proveedores y otros terceros con los que Sarga mantenga una relación de negocio.
La semana pasada, la Cámara de Cuentas hizo público un informe sobre las actividades revisadas del ejercicio 2015. Su conclusión principal es que las mismas resultaban conformes en todos los aspectos significativos con las normas aplicables a la gestión de las materias revisadas. No obstante, señala que en 22 casos y hasta el ejercicio 2015 la presentación de documentación y evidencias en algunos procedimientos, es mejorable. En la actualidad la mayoría de estos incumplimientos ya han sido subsanados.
Cambios principales efectuados por la nueva directiva
Aenor realizo el pasado mes de mayo de 2017 la “2º auditoría de seguimiento para los Sistemas de Gestión de calidad, gestión ambiental y seguridad y salud en el Trabajo”, recogiendo en su informe que “la organización está involucrada en cambios que han abarcado la dirección, el organigrama, los enfoques de la visión, misión y valores, estableciéndose objetivos estratégicos para el periodo 2016-2019”
Asimismo, el informe refleja que “se está trabajando en la realización de la nueva Relación de Puestos de Trabajo (RPT) dando cumplimiento a la Ley Autonómica 1/2017 (…) y se ha firmado un nuevo convenio colectivo en 21 de marzo de 2017”
También se habla de la realización de un “Plan de Responsabilidad Social.”, de un Manual de Prevención de delitos en materia Penal y de un nuevo Plan de Sistemas (TIC’s)”.
También se recoge “la existencia de una política integrada desde febrero de 2016 y de una herramienta interna para la identificación de requisitos legales y su posterior evaluación del nivel de cumplimento. Además, se está elaborando un nuevo cuadro de mando alineado con la nueva visión/misión/valores establecidos en la Política Integrada”
Además, prosigue,” la empresa ha realizado una auditoría energética en noviembre de 2016, como elemento de entrada para el establecimiento de objetivos relacionados con la disminución de consumos de gasoil y emisiones asociadas”.
A este respecto conviene señalar cómo en 2016 y fruto del análisis de los gastos generales, se pusieron en práctica diversas medidas basadas en un mayor control de los gastos generales; en la ejecución de contrataciones globales y en la adecuación de los recursos a las necesidades actuales. Como consecuencia de estas decisiones, Sarga logró en 2016 reducir sus gastos generales en un 8.21 % respecto a la cifra alcanzada en 2015.