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Miguel HGL

20/01/14

Un proyecto europeo pretende ahorrar hasta 30% en el uso de agua y energía en los cultivos

La Ciudad Politécnica de la Innovación acogerá, del 20 al 23 de enero, la tercera reunión general del proyecto, donde además se darán a conocer los retos más importantes de cara a los próximos meses, según informaron a EFE fuentes de la Universitat Politécnica de València (UPV).

La UPV participa en este proyecto europeo a través del Instituto de Ingeniería del Agua y Medio Ambiente (IIAMA) y del Centro Valenciano de Estudios sobre el Riego (CEVER).

El proyecto desarrolla una plataforma informática para capturar información de sensores ligados a los cultivos, la meteorología y la red de riego, procesarla y transferirla a un Sistema de Ayuda a la toma de Decisiones orientado a la programación de los riegos.

Así, en los cultivos se puede capturar información relativa al estrés hídrico o clorofila; en el suelo sobre la textura, humedad o nitrógeno; del ambiente sobre la humedad, viento o radiación; y de la red de riego, información sobre caudales, presiones o consumo energético.

"Este sistema contribuirá a conseguir una mayor eficiencia y ahorro tanto hídrico como energético, así como a reducir el uso de fertilizantes", aseguró a EFE Fernando Martínez Alzamora, investigador del IIAMA de la Universitat Politècnica de València.

Según Fernando Martínez, el objetivo del sistema informático es facilitar a los agricultores la aplicación de las nuevas tecnologías para tener más cosechas con menos recursos.

"Participamos en la preparación de modelos de toma de decisiones en la gestión de la red de riego, ya que la geografía española tiene unas peculiaridades que no tienen otros países europeos, donde la abundancia de lluvias no requiere almacenar y transportar el agua a presión a grandes distancias ni distribuirla de forma dosificada", señaló.

Dentro del proyecto, los equipos del IIAMA y del CEVER de la UPV trabajan también en el tratamiento de imágenes tomadas tanto por satélite como por vuelos tripulados y no tripulados y en la optimización de la explotación de las redes de riego para el ahorro de energía.

En el caso de Valencia, las nuevas tecnologías de riego se aplicarán a dos instalaciones piloto, una de cítricos en Picassent y otra de vid en Cheste.

En ambos casos se ensayará el riego deficitario controlado, que supone reducir o incrementar la aportación de agua en determinados etapas de crecimiento del cultivo. En el caso de la vid el ahorro puede oscilar entre el 10 y el 20 por ciento y en el de los cítricos, hasta el 30 por ciento.

Según indicaron las mismas fuentes, en la parte experimental participa también el Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA).

Así, los agricultores podrán optimizar la programación de los riesgos para ajustar los volúmenes suministradores a los cultivos y conseguir además una optimización energética, según Martínez, quien destacó que el riego supone actualmente el 2 por ciento de la demanda eléctrica anual en España.

También destacó la necesidad del ahorro económico en el uso de la energía, ya que aunque hasta el 98 había tarifas especiales. A partir de ese año comenzaron a incrementarse los costes, los cuales se han cuadruplicado desde entonces.

Particularmente en la Comunitat valenciana los costes energéticos se han multiplicado por 2,4 en los últimos diez años.

El proyecto arrancó en octubre de 2012 y está liderado por Nefatim, empresa israelita líder en la fabricación de material para el riego por goteo.

En total, el consorcio está formado por 17 socios -entre ellos la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO)- de 8 países diferentes: Israel, Reino Unido, Dinamarca, Holanda, Portugal, España, Italia y Grecia.