El Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) y la empresa Mafrica, trabajan conjuntamente para obtener carne de vacuno de elevada calidad sensorial.
Un proceso de maduración controlado permite mejorar las características sensoriales de la carne de bovino, como la ternura, los aromas y los sabores, para que tengan una mayor aceptación entre restauradores y consumidores. De esta forma se obtiene un producto de un alto valor añadido que permite revalorizar gastronómicamente la carne y, por lo tanto, proporciona herramientas a los ganaderos para mejorar el rendimiento económico de la carne que comercializan.
El Instituto de Investigación y Tecnología Agroalimentarias (IRTA) y la empresa Mafrica, trabajan conjuntamente para obtener carne de vacuno de elevada calidad sensorial.