Incorporar la pulpa de algarroba a la dieta de cerdos y corderos ayuda a la posterior conservación de su carne, sin penalizar su rendimiento productivo ni afectar negativamente al estado nutricional de los animales.
Se ha multiplicado hasta por diez en la última década
Incorporar la pulpa de algarroba a la dieta de cerdos y corderos ayuda a la posterior conservación de su carne, sin penalizar su rendimiento productivo ni afectar negativamente al estado nutricional de los animales.